viernes, 23 de octubre de 2015

Las patatas fritas tienen un componente cancerígeno, la "acrilamida" y está presente en altas concentraciones en muchas bolsas ¡Ojo con lo que comes!

Saltan nuevas alarmas por un estudio recientemente publicado en el que se ha detectado que el 17% de las patatas fritas de bolsa que se venden en España contienen altos niveles de una sustancia considera como un potente cancerígeno: la acrilamida. Algunas marcas contienen el doble de lo permitido. Y luego pensamos que todo lo que nos venden debe ser sano porque permiten su comercialización. 



La acrilamida es una sustancia química que se crea  en alimentos que contienen almidón (pan, patatas...) cuando se someten procesos de cocción a altas temperaturas (fritura, cocción, asado u horneado). 
El proceso químico que causa esto se conoce como la reacción de Maillard, que también oscurece los alimentos y afecta al sabor.
La acrilamida es capaz de inducir mutaciones genéticas y cáncer (mama, testículo, tiroides pulmón, riñón, ovario, piel y estómago, entre otros). Se la considera una sustancia genotóxica o cancerígena.
La IARC ha considerado a la acrilamida como un carcinógeno
Cualquier nivel de exposición a una sustancia genotóxica podría dañar de forma potencial el ADN y conllevar la aparición de cáncer, por lo que no se puede establecer una ingesta diaria tolerable (TDI) de acrilamida en alimentos. Es decir, cualquier dosis puede ser tóxica.
Según la EFSA el límite máximo considerado como tolerable es 425mg/kg de peso corporal/día para adultos y 50 para los  bebés.  La Comisión Europea estableció en 2013 un umbral máximo 1.000 microgramos de acrilamida por kilo de patata frita en bolsa.

¿Qué alimentos contribuyen a la exposición a la acrilamida?

  • Patatas fritas tanto frescas como en bolsa, café, pan, sobre todo el de molde y el crujiente (tipo picos, biscotes, etc), galletas, cereales del desayuno, pasteles y confitería.



Pues bien hoy quiero hablaros de un nuevo estudio publicado sobre la acrilamida presente en las patatas fritas de bolsa que os va poner los pelos de punta. El 17% de las patatas fritas de bolsa contienen altos niveles de acrilamida considerados como cancerígenos.

Los investigadores han analizado 40 marcas diferentes de patata frita tipo chips habituales en los supermercados españoles. La cantidad de acrilamida varía enormemente entre una marca y otra. Algunas marcas alcanzaban los 2.180 microgramos por kilo, el doble del máximo permitido por la Comisión Europea.

En las patatas que más acrilamida encontraron fue en las preparadas con aceite de girasol (2182 mg/kg) frente a las fritas en aceite de oliva (1332), en las más grasientas, en las protegidas de la luz del sol y en las envasadas en una atmósfera altamente protectora.


LAS MAS CANCERIGENAS
LAS MENOS CANCERIGENAS
Patatas fritas en aceite de girasol
Patatas fritas en aceite de oliva
Las más “pringosas” u oleosas
Las menos “pringosas”
Los envases que protegen de la luz
Envases no protectores de la luz
Atmósfera altamente protectora
Baja atmósfera protectora

Así que ojo con lo que comemos. Opta siempre por productos naturales y frescos. ¡Evita procesados!