miércoles, 21 de septiembre de 2016

¿Puede la alimentación prevenir el cáncer de ovario? Una dieta baja en lactosa y rica en calcio, así como tomar el sol reducen el riesgo

Una dieta rica en calcio y baja en lactosa reduce el riesgo de padecer cáncer de ovario según un estudio publicado en "British Journal of Cancer", pero no solo la dieta influye, sino que la exposición solar, sobre todo en verano, también reduce este riesgo.



El cáncer de ovario es la 5ª causa de muerte por cáncer en los países desarrollados, aunque por suerte las tasas de supervivencia a 5 años están aumentando, siendo alrededor del 50%.

Estudios previos habían ya relacionado el consumo de lácteos o lactosa con el riesgo de padecer cáncer de ovario. Este nuevo estudio se ha centrado en estudiar la relación entre la dieta de las mujeres afroamericanas y el cáncer de ovario.
En este caso eligieron a 409 mujeres afroamericanas de entre 20-79 años recién diagnosticadas de cáncer de ovario y para el control eligieron a 656 mujeres afroamericanas sanas. Ambos grupos completaron cuestionarios sobre alimentación y estilos de vida que incluían consumo de lácteos y exposición al sol.

Los investigadores encontraron que la ingesta de lactosa y leche entera de origen animal estaba significativamente asociada a un mayor riesgo de padecer cáncer de ovario. En el caso del yogur y el queso no se encontró asociando (estos productos son muy bajos en lactosa).

El consumo de calcio a través de la comida o en forma de suplementos se relacionó con un menor riesgo de padecer cáncer de ovario.

También observaron que el cáncer de ovario era más frecuente en mujeres con niveles de vitamina D en sangre bajos. Observaron que el 20% de las mujeres ingerían menor cantidad de vitamina D de la recomendada a diario (unas 600UI mínimo).

Las mujeres que se exponían al sol tenía menos riesgo de padecer cáncer de ovario que aquellas que no se exponían o evitaban el sol.
Los estudios demuestran que exponerse al menos 15 minutos al día al sol durante la primavera, el verano y el otoño en las horas de mayor insolación hace que generemos suficiente vitamina D (en el caso de que nuestra piel sea clara). Las personas con piel oscura necesitan exposiciones de 5 a 10 veces mayores para obtener niveles similares de vitamina D. 

Ya hemos hablado en varias ocasiones de la importancia de monitorizar los niveles de vitamina D en sangre y tomar un suplemento en caso de existir un deficit, esto es especialmente importante en los meses de invierno para prevenir y tratar el cáncer. En tu próxima analítica pídele a tu médico que mida tus niveles de Vitamina D en sangre.

CONCLUSIONES:
  • Abandona el consumo de leche de origen animal, consume leches vegetales si quieres usar un sustituto.
  • Toma alimentos ricos en calcio: semillas de sésamo, almendras, vegetales de hoja verde, aromáticas y especias, algas, naranjas, legumbres, etc.
  • Puedes consumir 1 ración de yogur o queso al día. Mejor de cabra u oveja y eco. Los quesos curados son los que menos lactosa contienen. 
  • Toma el sol a diario, unos 20 minutos al día, sin protección solar.
  • Mide tus niveles de Vitamina D en sangre, especialmente en invierno, para saber si necesitas un suplemento. 


Fuente: 
Bo Qin, Patricia G Moorman, Anthony J Alberg, Jill S Barnholtz-Sloan, Melissa Bondy, Michele L Cote, Ellen Funkhouser, Edward S Peters, Ann G Schwartz, Paul Terry, Joellen M Schildkraut, Elisa V Bandera. Dairy, calcium, vitamin D and ovarian cancer risk in African–American women. British Journal of Cancer, 2016; DOI: 10.1038/bjc.2016.289