martes, 20 de febrero de 2018

El consumo de alimentos ultraprocesados se asocia a mayor riesgo de cáncer. Ojo con los aditivos y envases de la comida basura, pueden producir cáncer.

Un estudio halla una asociación entre el consumo de este tipo de productos y un riesgo aumentado de desarrollar algún tipo de tumor, en especial de mama.

Un aumento del 10% del consumo de alimentos ultraprocesados en la dieta incrementa en un 12% el riesgo de padecer cáncer, y en un 11% el riesgo de cáncer de mama.
Por el contrario, una dieta que consiste principalmente de alimentos frescos o mínimamente procesados, incluyendo frutas, verduras, legumbres, arroz, pasta, huevos, carne y pescado se asoció con un menor riesgo de cáncer general y cáncer de mama.



  • ¿Cuales son los alimentos ultraprocesados?
Se considera productos ultraprocesados a aquellos que se someten a múltiples procesos físicos, biológicos o químicos. Estos productos alimenticios están concebidos para ser microbiológicamente seguros, altamente apetecibles y asequibles. ¡¡Son sabrosos, adictivos y baratos!!
Incluyen:
La bollería y pastelería industrial, los refrescos, los cereales azucarados, las galletas, los helados, el pan de molde, las barritas, aperitivos, los nuggets, las salchichas y embutidos, las patatas fritas de bolsa, las palomitas, los fideos y sopas listas para comer, alimentos listos para comer, chuches y golosinas....
El 80% de los productos del super pueden ser considerados alimentos ultraprocesados

Los alimentos ultraprocesados son pobres en nutrientes, ricos en calorías, azucares, sal y grasas. Además de un menor aporte nutricional respecto a los alimentos frescos como fruta y hortaliza a estos alimentos se les añaden aditivos que pueden ser cancerígenos y se envasan en recipientes que pueden incrementar el riesgo de padecer cáncer. Pero no solo se asocia la comida rápida a mayor riesgo de cáncer, sino también de dislipemia, obesidad, diabetes y enfermedad coronaria. 



Este tipo de productos suponen el 20% de los alimentos que se consumen en España, el 40% de los que se ingieren en Finlandia, Bélgica y Alemania, y nada menos que el 50% de las calorías diarias de los británicos.

  • ¿En qué consistió el estudio?
En el estudio se incluyeron a un total de 104 980 participantes, 22 821 (21,7%) hombres y 82 159 (78,3%) mujeres. A los que se siguieron durante 5 años. En este tiempo se detectaron 2228 casos de cáncer. 
Los participantes completaron cuestionarios online diarios sobre su alimentación, que escudriñaban la ingesta de más de 3300 alimentos y componentes alimentarios distintos. Agruparon los alimentos en cuatro categorías: crudos o mínimamente procesados, como semillas, frutas, huevo o leche. Ingredientes culinarios procesados, como el aceite. Procesados, como verduras envasadas o pescado en lata, quesos. Y ultraprocesados como pastelería, bolleria, refrescos, comida rápida, etc.

También tuvieron en cuenta factores de riesgo conocidos para el cáncer, como el sexo, la edad, el nivel educativo, el historial familiar de cáncer, si eran o no fumadores, y la actividad física que realizaban los participantes.

La ingesta de alimentos ultraprocesados ​​se asoció con un mayor riesgo de cáncer general y de mama en particular. En concreto, las grasas procesadas, las salsas y los productos y bebidas azucaradas se relacionaron con mayor riesgo de cáncer en general, en el caso del cáncer de mama se vio específicamente esta asociacion con la ingesta de alimentos azucarados. En el caso del cáncer de próstata y colon no se vio esta asociación, probablemente porque el número de hombres incluidos en el estudio es bajo y estos cánceres son los más frecuentes en hombres. 


  • ¿Que sustancias y aditivos pueden estar presentes en la comida ultraprocesada y aumentar el riesgo el cáncer?

Parece que colorantes, emulsionantes, conservantes, grasas trans, almidones modificados, azucares pueden ser muy nocivos para la salud. Los estudios apuntan a la acrilamida presente en muchos de estos productos y considerada un carcinógeno, o al Bisfenol A presente en los plásticos y latas donde se conservan estos alimentos, al dióxido de titanio que se usa como blanqueante alimentario (también presente en cremas solares) o los nitratos que se añaden a la carne y al embutido. A los que habéis leído mis libros o seguís este blog, todas estas sustancias os suenan, pero para muchos esto es nuevo y seguro que estaréis perplejos al leer que los gobiernos permiten que se usen sustancias potencialmente cancerígenas en los alimentos que se venden en cualquier supermercado.

Un nuevo revés para la industria alimentaria, un nuevo revés para aquellos que dicen COME LO QUE QUIERAS, nuevo revés para mis detractores que afirman que la alimentación no influye en el cáncer. ¡¡Que nadie vuelva a decir a alguien con cáncer "como lo que quieras, aprovecha y come lo que más te apetezca porque la alimentación no influye en el cáncer"!!


Para saber más sobre alimentación y cáncer tenéis múltiples artículos en este blog y en todos mis libros. FELIZ SEMANA Y SALUD PARA TODOS.

Dra. Odile Fernández. Médico de Familia, Superviviente de Cáncer. Autora del blog "Mis Recetas Anticáncer"